Un ratín libre antes de entrar a currar,
la cámara con el ojo de pez en el coche,
un poco de sol que animaba a hacer el gili,
Bruma predispuesta como siempre a jugar...
Conclusión: un diente de Bruma marcado en la lente del objetivo, hahahahahahaha
haxa salú, tallueu!
que maja la perrina jaja
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